¿Es legal la suba de impuesto a las Ganancias?

01/09/2020

Respecto a  la propuesta de subir la alícuota más allá del 35%, de acuerdo al Artículo 75 de la Constitución Nacional, el Poder Legislativo es el que puede establecer el tipo de impuestos directos, como es el caso de Ganancias por tiempo determinado en función de determinadas situaciones. Por más que esto cumpla con el requisito de legalidad, hay otros requisitos constitucionales para la existencia de un tributo o para subir la alícuota, cómo son el tema de la confiscatoriedad y de la razonabilidad. Esos principios constitucionales también se tienen que cumplir.

Hoy que estamos con un impuesto a las ganancias del 35% para las personas físicas y lo queremos subir a una tasa del 41 % porque, según la posición del Estado argentino, es que quiere darle más progresividad al sistema y quieren que los que más tienen más paguen, entonces estamos en una situación donde cazamos en el zoológico. La presión tributaria conjunta que sufren los trabajadores en relación de dependencia, los profesionales y demás se torna irrazonable. La realidad es que entre lo que pagan de impuestos a las Ganancias, por Bienes Personales sobre cifras que son totalmente bajas, si a eso le agregamos lo que pagan de aportes y de contribuciones a la Seguridad Social, más lo que pagan de los impuestos provinciales o municipales, el combo es tremendo.

Hasta dónde se puede subir?, ¿cómo impactan esto en el cumplimiento? Estamos en época de pandemia, pero aunque no estuviéramos en pandemia, estos niveles de presión tributaria  son irracionales. Hay que tener muy en cuenta que en cualquier país del mundo serio uno paga impuestos para recibir del Estado determinados servicios, si yo pago impuestos con una tasa alta, de impuestos a las ganancias que ya del 35% es alta o el 41% va a ser más alta, pero en otro país donde pago el 40% yo tengo que el Estado me brinda educación, salud, seguridad y no tengo que pagar nada adicional. Mientras que en Argentina para obtener educación de calidad, para obtener seguridad, para obtener salud tengo que pagar todo eso aparte, entonces la carga tributaria que yo estoy soportando y que debería volverme en servicios,  no existe esa contraprestación.

Hoy hay una informalidad de lo que es la economía de alrededor del 40/45%, toda esa gente hoy no está registrada y obviamente opera al margen de las normas, por lo cual no paga ningún impuesto. Vamos a seguir cargando sobre la gente que si paga, la parte de la gente que está en la economía formal va a seguir teniendo una presión muy alta, pero va a llegar un momento que no va a poder pagar más. A eso lo sumamos con la época de pandemia que estamos atravesando, que no tenemos claro cuándo va a terminar y las empresas, los profesionales, los asalariados no saben si va a seguir teniendo trabajo o no y le queremos levantar el impuesto a las ganancias. No somos serios. De esta manera lo único que estamos haciendo es ahuyentar inversiones, promover los despido. Estamos equivocados. Además de que estamos yendo en la dirección contraria a la que deberíamos ir.

Por Gabriel Hermida, Socio de Impuestos de Auren

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