Prensa| Jefes sin ego: los 7 principios básicos que los líderes tienen que aprender del management cuántico (El Cronista 2.5.2024)

07/05/2024

En tiempos convulsionados, muchos aseguran que es momento para trabajar internamente: partiendo de uno mismo y luego trasladarlo a los equipos. Justamente esto es lo que plantea el management cuántico.

¿De qué se trata? «Es un enfoque revolucionario en la gestión empresarial que toma inspiración de los principios de la mecánica cuántica. Reconoce la naturaleza dinámica e interconectada de los elementos en una organización», define Paula Altieri, socia de Veril Consultores.

Ahora, cuando hablamos de elementos «nos referimos a cualquier grupo de personas que habitualmente trabaja, aprende, se divierte o se relacionan en conjunto, y por lo tanto cambia, se transforma a través de sus relaciones. Podríamos agregar también que está en permanente desarrollo. Y acá es donde la física cuántica se expresa maravillosamente en cada una de sus leyes», añade Altieri.

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Punto de maduración

Con el management cuántico la idea del jefe queda atrás. «El liderazgo arranca en uno mismo, tanto para trabajar como para colaborar con los compañeros. Nos hace entender que somos energía y en su mínima porción ésta tiene la capacidad de cambiar constantemente», señala Altieri.

En esta modalidad «donde ponés el foco, ahí tenés la oportunidad de construir, generar el cambio, reinventar. Poniendo la mirada ya tenés la posibilidad. Y de hacerlo libre de prejuicios, emociones o interpretaciones«, asegura Altieri.

Ahora bien, para esto el equipo debe tener una cierta maduración personal de cada integrante y de todo el grupo en sí. «En mi caso, en el equipo, cada uno ya venía trabajando en un desarrollo espiritual. Ya habían explorado diferentes alternativas que tenían que ver con la energía», dice la socia de Veril.

Entonces, para esta líder, rápidamente se sumaron a su propuesta. «Una tiene la opción de dónde poner la energía, dónde poner la concentración. Cuando pongo mal la energía, los resultados son malos, y al revés se consiguen mejores experiencias», resalta Altieri.

«Esto generará un cambio en la gestión y habrá mayores niveles de comunicación en los equipos, se promueve la experimentación y la innovación, con metodologías agiles, que valoran las nuevas ideas, y la diversidad de pensamiento, entre otros beneficios», explica Fabio Fabri, socio de Consultoría de Auren.

Estos cambios tendrán un impacto en la gestión, pero eso dependerá de «los procesos en los que se aplique y del compromiso de la organización en llevarlos adelante, y de la constancia. Hay cambios de corto y de mediano plazos, pero las organizaciones se sorprenden muchas veces con los resultados obtenidos, al aplicar un enfoque nuevo», resalta Fabri.

«Lo que vale es reconocer, como idea general, que el enfoque newtoniano, que mira a las organizaciones y mercados como algo rígido y predecible, ya no es válido para estos tiempos de cambios continuos y profundos. A través del pensamiento cuántico se le da valor al potencial creativo de la incertidumbre, pasando de una mirada fragmentada a una mirada holística», concluye Fabri, de Auren.

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