En la presente entrega analizaremos si las organizaciones uruguayas se encuentran obligadas a presentar sus Estados Contables en pesos uruguayos.

Recordamos que la moneda de medición de los Estados Contables estará definida por lo que conocemos como la moneda funcional.

¿Qué es la moneda funcional?

Podríamos entenderlo a través de un ejemplo sencillo: en Santiago de Chile un café vale alrededor de 1.200 pesos chilenos. ¿Esto es barato o caro? Seguramente, para responder esta interrogante automáticamente haremos la conversión a pesos uruguayos. Esto es así debido a que en la mayoría de los casos, nuestros ingresos son en pesos uruguayos, al igual que nuestros gastos.

Para el caso de las empresas, funciona de forma similar.

Según las normas contables adecuadas, la moneda funcional es la representativa del entorno económico principal en el que opera la entidad, donde se genera y emplea el efectivo.

¿Cómo se determina?

Es la gerencia de la empresa, que cuenta con el mayor entendimiento del negocio y el flujo de caja, quien debería determinarla.

A estos efectos, la norma ofrece una guía de criterios a seguir:

– la moneda que influye principalmente en los precios de venta de los bienes y servicios, o del país cuyas fuerzas y regulaciones determinen fundamentalmente dichos precios.

– la moneda que influye en los costos de mano de obra, materias primas, materiales y cualquier otro costo que permita producir los bienes o servicios suministrados.

En caso que no se pudiera determinar siguiendo estos criterios, se deberán considerar, entre otros, los siguientes factores:

– la moneda en que la entidad obtiene su mayor financiamiento.

– la moneda en que están nominados sus flujos operacionales de caja.

– si una entidad extranjera es extensión de las operaciones de la matriz o si opera en forma independiente.

Si la empresa es parte de un grupo, ¿debe tener la misma moneda funcional que la matriz?

No necesariamente. En un grupo pueden existir empresas que usen distintas monedas funcionales dependiendo de sus realidades económicas. Al momento de informar,  se deberá proceder a convertir los estados contables a la moneda indicada por la matriz.

¿Se puede cambiar la moneda funcional?

Como se señaló anteriormente, la definición de la moneda funcional va de la mano de las transacciones y sucesos que se consideran relevantes en el ambiente económico de la empresa. Por lo cual, un  cambio en dicho ambiente podría conllevar a un cambio en la moneda funcional.

¿Los organismos de contralor aceptan una moneda de medición distinta del peso uruguayo?

La Auditoria Interna de la Nación, en resolución de fecha 19/05/2005, admitió la adopción de una moneda funcional para formular los estados contables distinta del peso uruguayo siempre que:

a) sea aprobado expresamente por la Asamblea de Accionistas.

b) que las notas que acompañan los estados contables sean explicitas al respecto.

c) los registros contables escriturados sean efectuados en moneda nacional.

En el caso de la Dirección General Impositiva y el Banco de Previsión Social, las liquidaciones de impuestos y aportes, según corresponda, deben realizarse en función del peso uruguayo en todos los casos.

Concluyendo: Las empresas deberían medir sus activos, pasivos, patrimonio, ingresos y gastos en la moneda de mayor influencia para su economía. Dicha moneda puede resultar distinta del peso uruguayo, siempre que considere que la misma le brinda información útil y refleja mejor la sustancia económica del negocio. Adicionalmente, no se debería perder de vista que para algunos organismos existen ciertos condicionamientos para el uso de dicha moneda. Esto último refiere a la moneda en que se presentan los Estados Contables, que será tema de otro artículo.